Ex edil de Iguala no fue detendo por la masacre, revela diputado

La PGR lo inculpó sólo por el crimen de Arturo Hernández Cardona y el síndico Justino Carvajal, afirma Jorge Camacho

En la sesión del gabinete de seguridad les fue proporcionada la información, cuenta a reporteros

REDACCIÓN

Durante 35 días, el alcalde con licencia de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, fue el personaje más buscado de México, junto con su esposa María de los Ángeles Pineda Villa. La Procuraduría General de la República los acusó de ser los autores intelectuales del asesinato de seis personas el 26 de septiembre y la desaparición de 43 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa.

Además, los acusó de ser los dirigentes del cártel criminal conocido como Guerreros Unidos. Durante todo ese tiempo “la pareja imperial”, como se les conoció, fueron los personajes más odiados de México. Incluso, según la información que empezaron a hacer pública las autoridades, la verdadera jefa del crimen era la esposa.

Tras su captura, sin embargo, ante el asombro general, el ex edil fue trasladado al penal federal del Altiplano, y su esposa fue arraigada por 40 días.

¿Qué pasó aquí? Fue la interrogante.

Sin embargo, la respuesta la dio esta noche el diputado local panista de Guerrero, Jorge Camacho Peñaloza: a Abarca y Pineda no se les está acusando por la muerte de las seis personas en Iguala ni la desaparición de los 43 estudiantes, sino solamente por el asesinato del luchador social Arturo Hernández Cardona y el ex síndico Justino Carvajal Salgado.
Camacho Peñaloza aseguró en plática con reporteros de Chilpancingo, que esta información les fue vertida a los diputados de la Comisión Especial para el seguimiento del caso Iguala del Congreso local, durante la reunión con el gabinete de seguridad.

Dijo que en esos casos, la esposa del ex edil no tiene ninguna orden de aprehensión, por eso sólo se le dictó arraigo de 40 días, por posibles delitos que pudieran aparecer. Pero por lo pronto, señaló, no se les está juzgando por la matanza de Iguala y la desaparición de los normalistas, como todo mundo cree.

Abarca Velázquez fue acusado por un testigo, primero en declaración ante un notario y, en marzo, ante la Fiscalía General de Guerrero, de haber asesinado personalmente a Arturo Hernández Cardona, luego de que la organización Unidad Popular, encabezada por éste, realizara manifestaciones y protestas en el palacio municipal en demanda de servicios y de abono.

El síndico Justino Carvajal, contra quien Abarca Velázquez había competido por la candidatura, fue asesinado el 8 de marzo del año pasado en las puertas de la casa de su madre. Por ambos crímenes se señalaba a Abarca.